lunes, 25 de abril de 2011

Final Copa del Rey 2011 - By Barrio!

Cabezazo y gol de CR7 min.102
El sueño azulgrana del triplete se esfumó con un cabezazo de Cristiano Ronaldo en el primer tiempo de la prórroga que bastó para que el Real Madrid venciera en una de las finales más tensas de la copa del Rey que se recuerdan de los últimos años.
El dominio culé durante la mayoría del encuentro de nada bastó cuando el portugués batió a Pinto rematando al fondo de las mallas un buen centro de di María que llegó tras una buena pared con Marcelo. Y es que, tal y como quedó demostrado con este partido, a veces no basta con ser superior en la posesión y la circulación del balón. La defensa madridista de mostró inexpugnable a lo largo de toda la final, salvo en algún tramo de la segunda mitad en la que el cansancio pudo hacer mella. Con Carvalho y Sergio Ramos excelentes en el corte, bien secundados por el trabajo defensivo de Marcelo y Arbeloa y la lucha de Pepe en el centro del campo, el Madrid pudo cerrar todas las líneas de pase azulgranas y apostar por la solidez defensiva como principal argumento para llevarse el gato al agua. El resto ya era cosa de la salida de balón de Xabi Alonso y la velocidad arriba de Cristiano y el fideo di María, quienes se vieron obligados a cobrar el protagonismo ofensivo ante un desdibujado Özil.
El Barcelona supo mantener a raya al tridente ofensivo madridista, con un gran Piqué escudado por el trabajo del jefecito Mascherano y la ayuda de Busquets unos metros por delante, pero no supo dar el golpe definitivo en la segunda mitad a pesar de las buenas ocasiones de que dispuso por mediación de Pedro y Messi. Sólo ellos pudieron llevar peligro a la meta de Casillas, ya que Dani Alves apenas tuvo oportunidades de pisar el área blanca y Villa parece empeñado en alargar su racha de mala puntería. Al mismo tiempo, ni Xavi ni Iniesta fueron capaces de encontrar el hueco para dar el pase definitivo que sirviera en bandeja el que seguramente habría sido el gol que habría decantado la final a favor del lado culé.

Como suele suceder en estos casos, el equipo que perdonó lo terminó pagando de la forma más cruel, y los peores pronósticos azulgranas se terminaron cumpliendo en el tiempo extra cuando el mayor físico del Madrid terminó por imponerse y acabar en el gol del triunfo merengue. Si a todo esto se le suma que el Barcelona no disponía de ningún revulsivo ofensivo en el banquillo para intentar decantar la balanza a su favor (Afellay era lo más parecido pero ni de lejos era mejor que los que había en el terreno de juego), la consecución del título copero se antojaba más que imposible para los azulgrana. Guardiola decidió acortar aún más la plantilla antes de empezar la temporada, y la disposición de un delantero menos fue un riesgo que en la final de Copa tuvo sus consecuencias ante la lesión de Bojan. En el bando contrario, a pesar de que no lo pueda parecer, Mourinho ha sabido dosificar de manera inteligente su plantilla de cara al último y decisivo tramo de la temporada, en especial en la zona del ataque, donde ahora dispone de más variantes que su rival y goza de una mayor frescura.

La jugada del gol anulado a Pedro min.68
Resultó extraño ver como el Barcelona se quedó sin poder disparar entre los tres palos en toda la primera mitad a pesar del dominio que infundió en el control del juego. Mientras tanto, los blancos intentaban crear la mayor cantidad de peligro posible con las contras de CR7 y las apariciones esporádicas de di María, aunque sus dos mejores ocasiones terminaron viniendo más por fallos de la zaga culé que por méritos propios. Poco antes de llegar al descanso, Pepe metió el miedo en el cuerpo a los de Guardiola con un tremendo cabezazo que se estrelló en el poste y ante el que Pinto tan sólo pudo observar la trayectoria del balón. El Madrid bajó la intensidad en la segunda parte, y esa falta de presión la aprovechó el Barcelona para crear sus mejores oportunidades de todo el encuentro, aunque las más claras fueron solventadas por un Casillas que de nuevo volvió a portar la corona de santo. El conjunto merengue supo aguantar, y, ante la falta de acierto de su rival, aprovechó su oportunidad en la prórroga por mediación de un Cristiano Ronaldo que parece disponer de bombonas en lugar de pulmones.



Cabe destacar la repetición del planteamiento táctico por parte del míster blanco. Una propuesta futbolística que, aunque defensiva y antiestética para muchos, resultó efectiva al fin y al cabo para frenar la avalancha de fútbol azulgrana. Es posible que Undiano Mallenco fuese permisivo en exceso con la dureza de algunas entradas realizadas por parte de algunos de los jugadores del conjunto blanco, aunque también hay que apuntar que realizó un arbitraje bastante correcto en líneas generales al no decantarse por favorecer a ninguno de los dos equipos.



El colorido que las dos aficiones aportaron de las gradas colaboró a engrandecer más si cabe todavía la espectacularidad del duelo y la noche transcurrió de manera tranquila sin que la convivencia entre las dos hinchadas se viera afectada por ningún incidente.

Tras el pitido final y la fiesta madridista, ambos conjuntos se encuentran empatados a títulos a estas alturas de la temporada, teniendo en cuenta que la Liga está casi decidida a favor de los azulgrana, y que parece ser que, ante la inminente disputa de las semifinales de la Champions League, Mourinho ha aprendido la lección tras la goleada en el partido de Liga que recibió su equipo en el Camp Nou. Parece ser que el luso se ha dado cuenta de que el trivote le resulta efectivo para frenar la avalancha de fútbol ofensivo de los azulgrana, y de que, también, si primero se cubre las espaldas, tarde o temprano terminará disponiendo de alguna ocasión para hacer daño. Veremos a ver qué sucede en Europa, aunque da la sensación de que el Real Madrid llega con las pilas más cargadas que el Barcelona a este tramo decisivo de la temporada y que los culés andan algo más justitos de fuerzas, aunque no olvidemos que es con su estilo de juego como menos cansancio acumula un equipo. Wembley espera y el último de los duelos promete ser apasionante. 





Campeón Copa del Rey 2010-2011
Un gol que vale una Copa del Rey







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